sábado, 29 de octubre de 2011

"EL RECUERDO" de José Luis Navarro Vallejo





EL RECUERDO


A Julia Pertusa, a sus padres.




El recuerdo,

como una nube,

puede diluirse en un cielo infinito,

no ser de nadie,

evaporarse, desaparecer

hasta llegar al tuétano de los olvidos

o concentrarse en un breve rincón del espacio,

estar presente

y ser de todos

posando en una conciencia tan fértil

como un hermoso valle

que lo sustente.



Y, entonces, llover,

llover a medida que a esa nube

se van uniendo otras en multitud,

y nace una flor donde sólo había silencio,

una flor en la memoria,

porque el recuerdo, último patrimonio

de quien desea llegar a nosotros, necesita

de la presencia...



y ahí está Julia,

la niña Julia que infla globos dentro de un macetero

tan grandes como el sol,

y que tiene la sonrisa temprana de las flores

y los ojos de ventana abierta a la luz.



Para Julia cielos anaranjados,

palomas de alas blancas,

rosas sobre el semblante del agua.



Sus mejillas rozan el aire

para no romperlo

porque el cielo es la urna

de los globos, almas de colores

que nos nutren los ánimos

anhelando justicia de lo arrebatado.



Junto al león fiero de la tempestad,

Julia, arropada de abrazos hasta el alma,

tu corazón empuja tejido en el borde de las olas.



José Luis Navarro Vallejo